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Tipos de cimientos para una casa: La base de una vivienda segura

Cuando se construye una vivienda, el primer paso crucial es establecer una base sólida. Esta base se conoce como cimentación y su correcta ejecución es vital para garantizar la estabilidad y durabilidad del edificio. Los diferentes tipos de cimientos no solo sostienen el peso de la estructura, sino que también distribuyen las cargas de forma uniforme hacia el terreno. Una cimentación deficiente puede derivar en grietas, inclinaciones o incluso en la pérdida total de la estructura con el paso del tiempo.

A la hora de proyectar una cimentación para una casa de una planta, es fundamental tener en cuenta tanto el tipo de terreno como las características de la vivienda. No existe una única solución válida para todos los casos, y por eso es esencial contar con un análisis técnico previo, especialmente en proyectos de vivienda unifamiliar.

En Difech Consolidaciones entendemos que la cimentación es el punto de partida de toda obra bien hecha. Nuestro enfoque combina análisis del suelo, tecnologías avanzadas y más de quince años de experiencia en el sector.

¿Qué determina el tipo de cimentación que se debe emplear?

Antes de elegir entre los distintos tipos de cimentación, es necesario estudiar a fondo las condiciones del terreno. El tipo de suelo, su resistencia, la profundidad a la que se encuentra el estrato firme, la presencia de agua o de rellenos, así como las características del edificio, son variables que influyen directamente en la elección de la solución más adecuada.

Una cimentación para una vivienda unifamiliar de una sola planta no tendrá las mismas exigencias estructurales que un edificio de tres alturas, pero eso no significa que debamos tomar decisiones a la ligera. Un terreno con baja capacidad portante o que ha sido rellenado artificialmente puede provocar asentamientos diferenciales con el paso del tiempo, afectando seriamente a la estructura. 

En este sentido, conocer si el terreno es natural o de relleno no compactado es clave. De hecho, puedes profundizar sobre este tipo de problema en nuestro artículo dedicado al asentamiento por terreno de relleno no compactado.

Cimentaciones superficiales: una opción eficaz para casas de una planta

Dentro de los tipos de cimentación existentes, las cimentaciones superficiales son las más utilizadas cuando el suelo presenta buena capacidad portante y no se esperan grandes cargas estructurales. Este tipo de cimentación es frecuente en viviendas unifamiliares y casas de una planta, ya que permite distribuir el peso de la edificación de forma eficaz sin recurrir a soluciones profundas.

Una de las técnicas más comunes es la losa de cimentación. Esta solución consiste en una gran placa de hormigón armado que cubre toda la base de la edificación, ideal para suelos arcillosos o con humedad. La losa permite una distribución uniforme de las cargas y se utiliza especialmente cuando se desea evitar movimientos diferenciales.

Otra opción muy utilizada es la zapata corrida, empleada cuando se construyen muros de carga. Esta cimentación se extiende longitudinalmente siguiendo la traza del muro, ofreciendo una solución eficaz y económica en terrenos de dureza media.

También es común encontrar zapatas aisladas en viviendas con estructura de pilares. Estas zapatas se colocan de manera puntual bajo cada pilar y pueden conectarse mediante vigas de atado para mejorar la estabilidad general de la edificación.

Cimentaciones profundas: cuando el terreno no lo pone fácil

Cuando el suelo superficial no es capaz de soportar las cargas del edificio, es necesario recurrir a cimentaciones profundas. Estas soluciones permiten alcanzar estratos más firmes a varios metros de profundidad y se emplean en terrenos de baja resistencia, en zonas con nivel freático elevado o cuando se requiere recalzar estructuras existentes.

Entre las técnicas más avanzadas se encuentran los pilotes y los micropilotes. Los primeros consisten en elementos estructurales verticales que se hincan o perforan hasta llegar a un terreno firme. Son especialmente útiles para obras de gran envergadura o en terrenos muy inestables.

Los micropilotes, por su parte, tienen un diámetro más reducido y se adaptan mejor a obras de rehabilitación, terrenos con difícil acceso o intervenciones bajo estructuras existentes. En Difech trabajamos con un sistema exclusivo, el Valve System, que permite instalar micropilotes con precisión y sin necesidad de grandes obras, lo que reduce molestias y tiempos de ejecución. Puedes conocer más sobre esta técnica en nuestro artículo sobre inyección de resinas expansivas y Valve System.

¿Cuál es la cimentación más adecuada para una casa de una planta?

La cimentación para una casa de una planta debe ser funcional, segura y ajustada a las condiciones reales del terreno. En la mayoría de los casos, se recurre a soluciones superficiales, siempre que el suelo lo permita. Las losas, las zapatas corridas y las zapatas aisladas siguen siendo las opciones más frecuentes, debido a su sencillez de ejecución y su buen rendimiento en terrenos con características aceptables.

Sin embargo, es imprescindible que cualquier elección se base en un estudio geotécnico previo. En ocasiones, lo que parece un terreno estable puede esconder problemas de compactación, presencia de rellenos o variaciones de humedad que afecten la cimentación con el paso del tiempo. Ignorar estos factores puede suponer costes muy elevados de reparación a futuro.

¿Qué ocurre si aparecen problemas estructurales en una cimentación ya construida?

Las patologías estructurales relacionadas con los cimientos pueden aparecer incluso años después de construida la vivienda. Grietas en las paredes, puertas que no encajan, suelos que se hunden o tabiques que se separan son señales de que la cimentación puede estar fallando.

En estos casos, lo primero es realizar un diagnóstico técnico detallado para conocer el origen del problema. En Difech ofrecemos este servicio sin coste en la primera visita. Una vez identificado el fallo, se pueden aplicar distintas soluciones: desde el recalce con micropilotes hasta la inyección de resinas expansivas que estabilizan el terreno y devuelven a la estructura su alineación original.

Nuestros sistemas permiten intervenir sin necesidad de desalojar la vivienda, y lo hacemos de forma limpia, rápida y precisa. Aportamos soluciones técnicas pensadas para durar y adaptadas a las necesidades reales de cada proyecto.

La importancia de impermeabilizar los cimientos

Otro aspecto a tener en cuenta es la humedad. En zonas con nivel freático alto o suelos húmedos, es necesario impermeabilizar adecuadamente la cimentación para evitar daños estructurales. El agua puede debilitar el hormigón, corroer las armaduras y generar patologías en el interior de la vivienda, como moho, olor a humedad o manchas en las paredes.

En nuestro artículo sobre cómo impermeabilizar cimientos, explicamos de forma detallada cómo proteger la base de una casa desde la fase de construcción, garantizando así una estructura duradera.

Cimentación segura, vivienda estable

La elección del tipo de cimentación es una de las decisiones más importantes al construir o rehabilitar una vivienda. Ya se trate de una cimentación para una casa de una planta o de una cimentación para una vivienda unifamiliar en terreno difícil, lo esencial es adaptar la solución a las condiciones reales del terreno y contar con profesionales con experiencia.

En Difech Consolidaciones te ofrecemos diagnóstico, soluciones y ejecución con tecnología propia y más de quince años de experiencia en cimentaciones y consolidación de suelos. Si estás construyendo una casa o notas síntomas de asentamiento, no lo dejes pasar. Nuestro equipo técnico puede ayudarte a resolver cualquier problema estructural de forma eficaz y duradera.

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